miércoles, 1 de marzo de 2017

¿Transgénero?



¿TRANSGÉNERO?
"Es biológicamente imposible, el cambio de sexo".
"Es una enfermedad mental, y debe tratarse como tal".
Afirma el ex jefe del departamento de psiquiatría del Hospital Jhons Hopkins (USA).
"La locura del transgénero, actualmente promovida por los medios de comunicación, es en realidad una enfermedad mental y su promoción está cooperando con trastornos mentales", ha dicho el ex Jefe de Psiquiatría del Hospital Jhons Hopkins.
 El Dr. Paul R. McHugh, quien se encuentra actualmente como un distinguido profesor de psiquiatría de este hospital de fama mundial, tambien dijo que "los cambios de sexo eran biológicamente imposibles" y, que "los médicos que promueven la cirugía de reasignación sexual, están colaborando con la promoción de un trastorno mental".
Además dijo "la transsexualidad es un trastorno mental que merece tratamiento" como la sociedad tambien es tratada para otros trastornos mentales y no debe ser atendido por los medios de comunicación o la profesión médica en la forma en que lo es.
 El Dr. McHugh, quien es el autor de 6 libros y al menos 125 artículos médicos, hizo estas declaraciones en un artículo en el Wall Street Journal titulado "Cirugía Transgénero no es la solución", en la que explicó que la cirugía transexual no es la solución para las personas que sufren un "trastorno de la suposición"(idea de que su masculinidad o feminidad es diferente a lo que la naturaleza le asigna biológicamente).
 En apoyo a su opinión, se refirió a un estudio reciente que mostró que la tasa de suicidio entre las personas transgénero, quienes se sometieron a cirugía de reasignación es 20 veces más alta que la tasa de suicidio entre las personas normales.
McHugh señaló tambien estudios de la Universidad de Vanderbilt y la Clínica Portman de Londres de los niños que habían expresado sentimientos transgénero pero, para los cuales con el tiempo del 70 al 80% habían perdido expontáneamente esos sentimientos (dando a entender que mucha de esa transsexualidad era, de hecho, trenzado por adultos que proyectan estos sentimientos en los niños).
"Mientras que el gobierno de Obama, Hollywood y los principales medios de comunicación como la revista Times, promueven la transxesualidad como normal", dijo el Dr. McHugh, estos "los responsables políticos y los medios de comunicación no le están haciendo ningún favor, ya que el público o al transgénero por el tratamiento de sus confusiones como un derecho en la necesidad de defenderlos, en lugar de tratarlos como un trastorno mental que merece la comprención, el tratamiento y la prevensión".
"Esta, intensamente sensación sentida por el transgénero, constituye un trastorno mental en dos aspectos. La primera es que la idea de la desalineación sexual es simplemente equivocada porque no corresponde con la realidad física. La segunda es que pueda conducir a resultados psicológicos sombríos".
El trastorno de una persona transexual, dijo el Dr. McHugh, está en "suposición" de las personas que son diferentes a la realidad física de su cuerpo, de su masculinidad o feminidad, según lo asignado por la naturaleza. Es un trastorno similar a una persona que sufre anorexia que se ve en el espejo y piensa que está con sobrepeso.
En este supuesto, el género de la persona está solo en la mente, independientemente de la realidad anatómica y ha llevado a algunas personas transexuales a presionar por la aceptación social y la afirmación de "su propia y subjetiva verdad personal". Como resultado, algunos estados (California, Nueve Jersey y Massachusets) han aprobado leyes que prohiben a los psiquiatras, incluso con permiso de los padres, hacer el esfuerzo por restaurar los sentimientos naturales de género a un menor transgénero.
El Dr. McHugh dijo "los defensores de los transexuales no quieren saber que los estudios muestran que entre el 70 y 80% de los niños que expresan sentimientos transgénero, expontáneamente pierden eses sentimiento con el tiempo".
Además, para aquellos que se sometieron a cirugía de reasignación sexual, la mayoría dijo que estaban "satisfechos" con la operación pero, sus posteriores ajustes psicosociales no fueron mejores que aquellos que no tuvieron la cirugía. "Y así en Hopkins dejamos de hacer la cirugía de reasignación de sexo ya que, a pesar de producir un satisfecho, el paciente seguía preocupado y nos parecía una razón insuficiente para amputar quirúrgicamente órganos normales" expresó el Dr. McHugh.
También advirtió, el Dr. McHugh, en contra de permitir o fomentar determinados sub grupos de los transexuales como los grupos de jóvenes susceptibles a la sugestión de "todo es normal", educación sexual y consejeros de la diversidad sexual en las escuelas que como "los líderes de los cultos", pueden animar a estos jóvenes a distanciarse de sus familias y ofrecerles asesoramiento sobre rebatir argumentos en contra de tener la cirugía transexual.
El Dr. McHugh también informó que hay "médicos equivocados" quienes trabajan con niños muy pequeños que paracen imitar al sexo opuesto, administrando hormonas de la pubertad, retrasando estas para hacer cirugías de cambio de sexo posteriores, a pesar de que los fármacos frenan el crecimiento y aumentan el riesgo en los niños de causarles esterilidad. Esta acción está cerca del abuso infantil dado que, la mayoría de esos niños abandonan su confusión y crecen de forma natural en la vida adulta.
"Es biológicamente imposible el cambio de sexo", "Las personas que se someten a la cirugía de reasignación de sexo no cambian de hombre a mujer o viceversa". Más bien, se convierten en hombres o mujeres masculinizadas o feminizadas. "Afirmar que esto es cuestión de los derechos civiles y fomentar la intervención quirúrgica es en realidad colaborar y promover un trastorno mental".

21/06/2016