miércoles, 1 de marzo de 2017

La identidad de Género en los niños






Ocho puntos del Colegio Americano de Pediatría, acerca de la Identidad de Género en Niños.



El Colegio Americano de Pediatras (ACPEDS), asociación de pediatras y otros profesionales de la salud, dedicados a mejorar las condiciones de salud de los niños en los estados de Estados Unidos, ha emitido la siguiente declaración sobre la identidad de género en niños.
El Colegio Americano de Pediatría (AMERICAN COLLEGE OF PEDIATRICIANS), insta a los educadores y legisladores a rechazar todas las políticas que condicionan a los niños a aceptar como “normal”, una vida de suplantación química y quirúrgica del sexo opuesto.
1.- La sexualidad es un rasgo biológico objetivo: “XY” y “XX” son marcadores genéticos de la salud (no marcadores genéticos de un trastorno). La norma para el diseño humano es ser concebido ya sea hombre o mujer. La sexualidad humana es binaria por diseño, con el obvio propósito de la reproducción y el florecimiento de nuestra especie. Este principio es evidente por sí mismo.
Los trastornos extremadamente raros de la diferenciación sexual (DSD) incluyendo, pero no limitando, a la feminización testicular y la hiperplasia suprarrenal congénita, todas son desviaciones médicamente identificables de la norma binaria sexual y son correctamente reconocidos como trastornos o desordenes de diseño humano. Los individuos con TDS (trastorno de diferenciación sexual), NO CONSTITUYEN UN TERCER SEXO.
2.- Nadie nace con un género. Todo el mundo nace con un sexo biológico marcado. Género (toma de consciencia en el sentido de sí mismo como hombre o mujer) es un concepto sociológico y psicológico, no un objetivo biológico. Nadie nace consciente de si mismo como hombre o mujer; esta forma de consciencia se desarrolla con el tiempo y, como todos los procesos de desarrollo, puede ser desviado por las percepciones subjetivas de un niño, las relaciones y las experiencias adversas desde la infancia en adelante. Las personas que se identifican con la sensación se que “son del género opuesto” o “algún punto intermedio”, no crean o forman una base para la transformación de un tercer sexo, pues biológicamente siguen siendo hombre o mujer.
3.- La creencia de una persona de que él o ella es algo que en realidad no es, es un signo de confusión de pensamiento. Cuando un niño biológicamente sano cree que es una niña, o una niña biológicamente sana, cree que es un niño, existe un problema psicológico, su problema está en su mente, no en su cuerpo y debe tratarse como tal. Estos niños sufren de “Distrofia de Género”. La Distrofoa de Género (GD), como trastorno de identidad de género (GID), es un trastorno mental reconocido en la más
reciente edición del manual de diagnóstico y estadístico de la Asociación Americana de Psiquiatría (DSM-V). Las teorías de los aprendizajes psicodinámicos y sociales de GD-GID nunca has sido desmentidas.
4.- La Pubertad no es una enfermedad y las hormonas bloqueadoras de la pubertad pueden ser peligrosas. Reversibles o no, las hormonas de bloqueo de la pubertad inducen a un estado de enfermedad que inhiben el crecimiento y la fertilidad en un niño biológicamente saludable.
5.- De acuerdo a la DSN-V, el 98% de los niños y el 88% de las niñas confundidos o confundidas con su género, eventualmente aceptan su condición biológica sexual, después de que atraviesan el período de la pubertad de manera natural.

6.- los niños que utilizan bloqueadores de la pubertad para suplantar el sexo opuesto, requieren también hormonas del otro sexo en la adolescencia tardía. Las hormonas sexuales cruzadas están asociadas con riesgos peligrosos para la salud, incluyendo presión arterial alta, coágulos de sangre, accidentes cerebrovasculares y cáncer.
7.-Las tasas de suicidio son 20 veces más altas en los adultos que utilizan hormonas del sexo opuesto o que se han sometido a cirugía de reasignación de sexo que los que no utilizan estos métodos, incluso en Suecia, donde se encuentra la mayoría de los LGBQT.
8.- Introducir a los niños en la creencia de que es “sano y normal” una vida de implantación química y quirúrgica del sexo opuesto es UN ABUSO INFANTIL. Haciendo suya la discordancia de género en forma normal a través de la educación pública y las políticas legales, confunden a
niños y a padres, trayendo como consecuencia que más niños se presenten en las “Clínicas de Género”, en las cuales se les administran medicamentos que bloquean la pubertad, asegurando virtualmente un tratamiento de por vida de hormonas del sexo opuesto las cuales son tóxicas y cancerígenas a la larga. Luego también es probable que consideren la mutilación quirúrgica de su cuerpo biológicamente sano como adultos jóvenes (negocio cada día más lucrativo para muchos).

Autores del artículo:
Michelle A. Crestella, M.D. Presidenta del American College of Pediatricians.
Quentin Van Meter, M.D. Vicepresidente del American College of Pediatricians.

Traducción: Josefina Ayala
08/07/2016